para decirte, venga, hazte un peta y me lo cuentas.
jueves, 21 de octubre de 2010
Llamar la atención sobre las luces de neón...
Pero no sabes lo que es caer desde un precipicio y que él aparezca de golpe y de frente
para decirte, venga, hazte un peta y me lo cuentas.
Empecé a quererte exactamente cuando me llamaste para decir que me dejabas. De hecho fue en ese preciso momento cuando olvidé el amor que sentía antes, me olvidé de la ternura y del sexo, de tu lengua, me di cuenta de que lo que había sentido antes no era más que el simple reflejo de lo que era el amor. Descubrí que no te había querido nunca. De repente pensé en aquella torturaba que practicaban en Francia. ¿Sabes qué hacían?. Ataban las extremidades de una persona a cuatro caballos y los azuzaban en direcciones diferentes. Pues así es cómo me sentí. Así es cómo me siento. Ahora ya sé lo que es amar. Te amo con esa clase de amor que había rezado por sentir cuando era una adolescente y que ahora rezo por no volver a sentir nunca más.
para decirte, venga, hazte un peta y me lo cuentas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario