DISAPPEAR

Su madre la criticaba por su ropa ancha y su pelo precioso pero nada arreglado. Su padre la ignoraba, a veces incluso, la hacía sentir invisible totalmente. Sus hermanos, mayores, se burlaban de ella por ser una empollona y el resto del mundo la miraba con malos ojos. Entonces, ella se enteró de su enfermedad, y lo más increíble fue lo que hizo ella: nada. Ni se inmutó. No lloraba, no hablaba, no hacía absolutamente nada. Ese día su madre le preparó el mejor desayuno y le cepilló el pelo con un brillo en los ojos indescriptible. Su padre la abrazó, lo cual para ella significaba muchisimo, pero seguía sin decir nada. Sus hermanos la llevaron al cine, vieron su pelicula favorita. Pero ninguno de ellos podía explicar el silencio de la pequeña adolescente. Un día, sin mediar palabra, salió de su cuarto y dijo: "a la hora de la verdad os cagáis, os arrepentís, y acudís a mí. Pero pronto yo no estaré, y entonces, estaréis jodidos.